domingo, 12 de junio de 2011

Crápula

(Del lat. crapŭla, y este del gr. κραιπάλη).

1. f. Embriaguez o borrachera.
2. f. Disipación, libertinaje.
3. m. Hombre de vida licenciosa.

Real Academia Española

Crápula es un individuo vicioso, libertino e inmoral.. La crápula originalmente era una vida licenciosa y disipada como la de los bohemios que se entregan de lleno al desenfreno. Con el tiempo pasó a ser calificativo de los que la practican.El término deriva de una palabra griega que significa "pesadez de cabeza" debido a la embriaguez, y de allí deriva a borrachera, como otra acepción indicada por la DRAE.
Óleo de Carlos Ferreyra
Te cantaron todos conventillo feo
cuna de malevos y taitas de flor
y en tus tardecitas de maya y lucera
te llora en el patio algún bandoneón
conventillo triste del chamuyo lunfa
de la fabriquera de humilde percal
hoy con un bostezo de gringo aburrido
te ha quedao perdido con el arrabal.

Cuantas noches de acorde sentido
en tus puertas volquó mi corazón
entonando los versos de algun tango
que parecia un lamento muy dulce y dolor
por amor de crápula bohemia
a la vera de algun prohibido amor
horas reas que no han de volver nunca
por eso ahora te digo adiós.

Tango "El conventillo"
Fragmento / Letra de Antonio Cícaro

4 comentarios:

Jorge Maseda dijo...

justo la utilicé para
mi último Post,
"Niños-polilla",
me pareció fantástica.

Saludos!

BARROS MATOS dijo...

Ante el asombro del pueblo español, a quien le costó creer y digerir la noticia, en su edición del 24 de Abril del 2008 el diario EL PAÍS publicó un artículo con un título que anuló todo interés las otras noticias: “El alcalde de Puerto Real tilda al rey de "crápula" y "deleznable” La Fiscalía de Cádiz ha abierto un expediente al alcalde de Puerto Real, José Antonio Barroso, de IU (Izquierda Unida, partido contrario a la permanencia de la monarquía) después de que llamara "crápula" y "corrupto" al Rey Don Juan Carlos I y a su padre en el aniversario de la República, el pasado 14 de abril, según informa un diario local gaditano. El expediente se encuentra en "fase de estudio" para ver si Barroso ha incurrido en algún delito tras sus declaraciones.
El regidor afirmó entre otras cosas que "el Borbón es hijo de un crápula. El Borbón de condición deleznable, el presente, no es menos deleznable de lo que su padre fue. Afecto al golpe de estado, despreciado por el tirano, al que reiteradamente le solicitó su incorporación al ejército faccioso. El Borbón es hijo de una persona de condición licenciosa, deplorable, deleznable. No menos licenciosa que la de su esposa".
No contento con esas declaraciones, agregó: "Me parece que hay que romper ese manto de silencio que envuelve a la monarquía. El rey es un funcionario público, que hay que someter a las mismas exigencias que al común mortal", dijo el también diputado provincial. Y fue más allá para pedir "echar" a Don Juan Carlos, "al Borbón, aunque no lo colguemos con los intestinos de los obispos, lo tendremos que echar".
Debido a sus declaraciones, Barroso fue imputado por el delito de injurias graves contra la Corona, ante lo cual el acusado agregó: el Monarca utiliza fondos privados para sus escarceos amorosos, y que debe explicar por que puede gozar de la 4ª fortuna de España. Y ha dejado claro que no piensa dimitir, ya que indicó que si lo procesan "es por un delito de opinión política, no por robar ni por defraudar, malversar o estafar". Asimismo, manifestó que si lo condenasen e inhabilitasen "lo harán por un llamado delito político, aunque esto en este momento no tenga cabida en el ordenamiento jurídico de este país, menos en aquellos que se refiere al Rey, lo cual denota claramente las fallas democráticas que tiene este país y la Constitución".
La justicia Española aún debate con los defensores de este Diputado, en libertad bajo fianza pagada por la IU, en una larga serie de alegatos a favor y en contra.
El raro caso de un funcionario que creyó su deber salir en defensa sus ideales, convencido de la consistencia de sus acusaciones.
Equivocado o acertado, pensó en el país y no en su conveniencia personal, dispuesto a responder ante la justicia con sus verdades.
BARROS MATOS

Celestacha dijo...

Estimado Barros Matos, su comentario ha sido publicado. Hay veces, por alguna razón cibernética que desconozco, que deja el comentario en "suspenso" para que yo lo apruebe ( pasa por el censurador,ja ja ). Y yo recibo el aviso, de manera que rápidamente me fijo si es un spam, una propaganda o alguien digno como Ud. que nos acerca siempre comentarios interesantes. Y lo apruebo y se publica. De manera que cuando Ud. vea que no sale publicado, no se preocupe ni haga más intentos. No luche con estos sistemas que son maravillosos tanto como odiosos, a veces. Sabrá que al poquito tiempo serán editados.
Mis saludos para este domingo de pastas y tuco.

Anónimo dijo...

Qué buena acotación la suya amigo Barros!. Y debo decirle que opino igual que el funcionario al que alude. Los sistemas monárquicos son, además de obsoletos y decadentes, la base misma de la claudicación ética de las sociedades que “alimentan” a familias enteras que son plus multi millonarias y que resultan ser una sarta de vagonetas. En el caso español debe reconocerse que el rey Borbón (educado bajo la tutela del mismísimo Franco) tuvo un rol protagónico en defensa de la transición democrática de la península. Pero, punto. El criterio de los regímenes monárquicos democráticos es que el Rey ejerce la Jefatura del Estado y la autoridad electa (generalmente primer ministro) ejerce la Jefatura del Gobierno. La responsabilidad del Rey entonces está atada a la representatividad del Estado frente a las otras naciones, y en estos tiempos de paz occidental en donde no hay para países como España hipótesis de conflictos reales, no hay mucho más para que la Casa Real haga diariamente, mas que holgazanear y gastar los dineros públicos que la gente común aporta al erario. Se podrá decir que el presupuesto de los Reyes (que viven como “reyes”) y su numerosa familia es insignificante respecto al P.I.B. (producto interno bruto) español. Pero pienso amigo Barros que no importa en esto el “quantum” sino las actitudes, las conductas. Por poco que sea es un derroche inadmisible. Y un ejemplo sería que se disponga que en caso de mantenerse la monarquía, el Rey cobre un salario equivalente al del primer ministro y que todos los demás de su familia salgan a trabajar. Y –para mi lo mejor- refundar una república de iguales en donde la igualdad total de los ciudadanos sea el punto de partida del ejercicio de la libertad. Es decir: que todos salgan del mismo “punto de partida” en la carrera de la vida y lleguen dentro del marco legal del país a donde su libertad y creatividad los lleven. En definitiva, si de vida licenciosa se trata, las Casas Reales y sus integrantes, viven de licencia en licencia. Son crápulas entonces. Sin borracheras ni cosas por el estilo. Pero crápulas.
Un abrazo.
Funes

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